Autor: Javier Sierra.
Año de publicación: 2014.
Editorial Planeta. 300 páginas.
Comencemos diciendo que es esta la primera incursión en la literatura de Javier Sierra, destacado autor de lo que podríamos denominar novela esotérica y por ende, la primera obra reseñada en este blog del mismo escritor.
Diremos también que sin ser una novelón, tampoco está nada mal como lectura e incluso puede ser recomendable para aquellas personas que tengan un cierto interés por la Historia del Arte.
La obra, escrita en primera persona por el autor, tiene un hilo argumental bastante sencillo. El protagonista, se encuentra en una visita invernal al Museo del Prado a Luis Fovel -el maestro que da nombre al título-, un misterioso personaje con el que tendrá varios encuentros y en los que éste le va desvelando algunos aspectos ocultos para el gran público sobre obras de los grandes pintores presentes en la famosa pinacoteca como Rafael, El Bosco, Brueghel o El Greco.
En paralelo a eso, Sierra intenta, sin demasiado éxito, introducir una subtrama "amorosa" que implica a una estudiante amiga del protagonista y que queda ocluída en medio de la obra. De igual manera, intenta darle una cierta tensión a la misma con la aparición de Julian de Prada, otro misterioso personaje que trata de "advertir" al protagonista, de lo inoportuno de su relación con Fovel y de las ideas que el mismo le enseña.
Es decir, algo así como la némesis del Maestro del Prado pero deslavazado, y es que precisamente esa falta de profundidad y ese esquematismo, tanto en la trama como en los personajes, es quizás el principal debe de la obra. Sin embargo, es cierto que no todo es malo en la novela, ya que es una lectura amena, que se lee con ritmo y que incluso contiene pinceladas interesante sobre las obras pictóricas que van desfilando a lo largo del libro y que acertadamente, la editorial, ha incluido a color en la edición para que puedas ir contrastando visualmente esos "secretos" de los que el libro habla.
Es cierto que quizás algunas de las frases que las editoriales emplean para publicitar este tipo de libros, pueden crear una expectativas excesivas sobre el contenido y el alcance que los mismos pueden ofrecer. No obstante, si dejamos de lado esas licencias comerciales de la editorial y nos acercamos a él sin prejuicios, puede ser una lectura resultona y perfectamente disfrutable.
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